UN DIA CON MEROLIN

Por Yuquiabe Romero

Carlos Daniel Guzmán Flores de 22 años, nacido el 4 de enero, mejor conocido como el payaso Merolin, de cabello oscuro, rizado y largo hasta el hombro con una personalidad y un carisma muy agradable e inigualable.

Esta entrevista fue realizada en un comedor de un centro comercial al oriente de la ciudad de México, Merolin viste con una playera de mangas largas oscura y un pantalón oscuro. Comenta su vida con mucho moviendo de manos, así como su rostro da una idea de alegría.

Merolin, cuyo nombre proviene de un programa de radio activo, en el cual hicieron una sátira hacia la sociedad; comenta que hay diferentes tipos de payasos, como los que son tristes, los “trampa”; que son solitarios y con dotes de marginación social, el cara blanca; cuya característica es de apariencia fría y lunar, el tipo europeo; que sólo tienen unas chapitas en la cara y los Augustos; que tiene la característica de ser más pícaro, feliz, tonto o tierno. En estos momentos se encuentra enfocado a fiestas infantiles y de adultos.

Cuenta con un sinnúmero de uniformes, desde los muy coloridos, hasta los muy sombríos, depende al público que se dirija, pues hay ocasiones en que a los niños no le gustan los payasos, entonces cuando ven algo tan llamativo se asustan, se cohíben, la idea es llegar con una imagen más humanizada o puedes llegar con una vestimenta llamativa, pero depende de la gente.

” Al paso del tiempo haré una imagen única para que la gente reconozca mi trabajo, no por como valla vestido”

Cuando era niño no le gustaban los payasos, porque fue pobre y tenía el concepto de que los payasos sólo son para gente rica; “aparte una vez me sacaron los calzones, pero fue un truco de magia donde amarras unos pañuelos, los metes, los jalas y salen unos calzones pero la gente piensa que son tus calzones; son calzones preparados, y todos los niños se burlaron de mi”

Lo más difícil de ser payaso es ser completo, como que sepa manejar a la gente, atraer a la gente, que sepa callar en el momento exacto, que sepa hablar en el momento exacto, que sepa hacer magia, que sepa hacer malabares, que toque música, que haga cosas impresionantes, que sea noble. Debe de tener un poquito de las personalidades de toda la gente tiene. El se ríe siempre, diario, a todas horas de su vida de todo el mundo, de la gente pero sin humillarlas, siempre intentando ver el lado amable de las cosas.

Merolin y Daniel cuentan con una personalidad idéntica, aunque sus maestros, le comenten que no debe de ser así. El maestro más representativo fue el primero que tuvo, aunque algunas personas tienen la idea de que los payasos se burlan de la gente y hay algunos payasos que no valoran a la gente.

Merolin comenzó a trabajar como payaso por necesidad hace aproximadamente cinco años, inició como Botarga en una agencia de payasos especializada en eventos infantiles aunque sólo trabajaba los fines de semana. Posteriormente estuvo trabajando en eventos políticos, en eventos masivos, en eventos pequeños, en el hipódromo de las Américas.

“yo creo que el ser payaso es una profesión mal juzgada, pero es una profesión que es mas completa, que necesitas tantos recursos “.

Actualmente se considera payaso de tiempo completo.
En un principio sus padres y sus amigos no aceptaban la idea de que Daniel trabajara como payaso; pero la profesión de payaso le da una gran libertad.
La idea que tiene es que su empresa es hacerla algo más grande, pero en estos momentos no puede atenderla por los estudios.
En sus ratos libres estudia la carrera de Relaciones Comerciales en la ESCA del IPN, ensaya, hace malabares, está aprendiendo a tocar el saxofón, le gusta mucho viajar, ha conocido el sureste, así como Tlaxcala, Nuevo Laredo y es bien fiestero.

“la gente ve al payaso por debajo de las expectativas profesionales y creo que es una idea errónea”

Ser payaso lo ha dejado económicamente satisfecho, le ha permitido viajar a muchos lados y como persona lo llena mucho, le gustaría poder comunicar muchas cosas, como los valores pues hay muchos niños mimados pero está bien que tengan libertad de hacer lo que quieran pero hay que pensar en las terceras personas.

Algo que le cambió la vida fue que trabajando en la merced de payaso hace cuatro años y medio, se acerca una niña con polio y le empezó a hacer la plática. Ella le pregunto- ¿como estas payaso? Y el le contestó ¿bien y tu?, Ella respondió- pues estoy enferma pero le hecho muchas ganas -y el se preguntó ¿cómo una niña tan pequeña puede tener una filosofía tan grande?, después de eso su padre fue por ella.
Ella se acercó y me dio un abrazo. Una muestra de cariño de un niño no tiene comparación y mucho menos de alguien que no te conoce. Es posible que esa niña le regale abrazos a quien sea pero le dio un abrazo y tocó una fibra de que no sabía que existía.

También ha tenido tragos amargos como la vez que no tuvo tanta experiencia fue a trabajar a una casa de ricos y en la fiesta nadie se rió, la vez que lo quisieron asaltar.
Hay ocasiones que ha tenido que ir a trabajar estando triste pero esto no le ha impedido trabajar. Merolin no tiene por que agarrar los problemas de Daniel, y cuando está triste por alguna razón la función que hace en esos momentos le va muy bien.

“Hay muchas veces que sales de los lugares en donde trabajas, hay partes muy feas por la delincuencia y esa sensación es muy fea, pero no creo que eso se el pensar único del payaso, si no a esas horas de la noche es algo de lo que no me gusta tanto. El trabajo es muy constante de repente, pues hay veces q no hay mucho trabajo, y ocasiones que tengo mucho trabajo.”


Una experiencia más es cuando trabajó en un manicomio. Ellos son diferentes aunque de diversas edades, hay desde niños, hasta adultos. Ese día les preparó un número de malabares para atraerlos, suponiendo que están sentados, que vean algo que se mueva muy rápido pero no les interesó para nada, mejor les puso música y fueron muy felices; cumplí su cometido que era entretenerlos pero como payaso no fue gratificante.
La gente es una parte muy importante que tu como payaso debes de dar lo mejor de ti, para que la gente se interese por ti.

En esta entrevista posteriormente Merolin comentó que tenía una cita acerca de la opinión que tenía del canal 11 a las 4pm, pidió que continuáramos con la entrevista en el camino hacia avenida Insurgentes.

La plática continúa caminando sobre la av. Eje 6. Cerca de la central de abastos.

Según Merolin, las reglas que debe de seguir un payaso es no tomar, no fumar, no decir groserías, no responder agresiones con otras agresiones; pero cree que son lecciones de vida, más que reglas. También comenta que hay muchos congresos, conferencias y competencias de payasos, así como asociaciones de payasos.


Los payasos que Merolin admira son Chispin, jefe de los payasos que trabajan en Chapultepec, fue de los primeros que trabajan en la calle, presidente de esa asociación. Dos chavos que trabajan a un lado del zócalo que uno de ellos iba a trabajar en el circo Ringling Brothers, Zarzamora (Gabriel Zamora), los hermanos Miranda, y Bobo pelos de escobeta; que ha ido a muchas partes de l mundo., que hacen de lo más difícil, lo más sencillo.

Para contrataciones del payaso Merolin al 57 45 21 33 o al 044 55 32 59 24 62